La guarida se abre para dar paso a una chica de cabello azulado y ojos blancos, de mirada fría y penetrante.
- Bueno, ahora sí no hay vuelta atrás, comenzaré una nueva vida, totalmente distinta... y empezaré por hacerme cargo de esta organización -
Susurró la chica y se puso una capa negra con nubes rojas y usaba un kunai para tachar el emblema de Konoha en su bandana...